lunes, 29 de octubre de 2007

EL "YIHAD" Y ESPAÑA

EL “YIHAD” Y ESPAÑA

(Esquema inicial para un análisis en profundidad)

Fernando Pinto Cebrián


- La NOTICIA última: “Célula “yihadista” desarticulada en Burgos…” (25 de octubre de 2007).

- La PREGUNTA, que se hacen los teóricos, especialistas y expertos en terrorismo internacional tras el atentado del 11-M en Madrid y ahora con la desarticulación aludida: ¿por qué España está en el punto de mira del terrorismo “yihadista”?

- La RESPUESTA o RESPUESTAS:
En primer lugar las apuntadas por los expertos atendiendo a las razones generales que suelen citar los “yihadistas”:

. Por la “participación militar” española en la última Guerra del Golfo.
. Por el “belicismo” español contra los musulmanes, determinado con la presencia militar de España en sus países (Afganistán, Líbano,…)
. Por la “ocupación” española de Ceuta y Melilla.
. Por la “presencia” española en el Magreb” influyendo negativamente en los musulmanes de la región (concretamente en Marruecos); presencia que empuja a las acciones terroristas en Marruecos contra españoles.
. Por la “propaganda yihadista” en contra de España, que empuja a la actividad terrorista en su territorio, apoyándose en las razones anteriores y la histórica de “ocupación” del “Al-Andalus” (está última cubriendo cualquier fallo o limitación de otras propagandas más concretas y actuales).
. Por la colaboración internacional española en la lucha contra los “yihadistas” que implica relación con los enemigos de “su Islam” (los EEUU, Israel y aliados preferentemente).

Respuestas que, de una manera u otra, tratan justificar las acciones violentas en territorio español en la base a las “agresiones y humillaciones”, “históricas” y actuales, sufridas, según su opinión, por los musulmanes a manos españolas.

De todas formas, consideramos que hay más posibles respuestas a sumar en un segundo plano:

. La “venganza” por los “yihadistas” inmolados (“mártires” para ellos) el 11-M.
. La “réplica” a las “humillaciones” sufridas durante el juicio del 11-M.
. La constante actividad policial contra los “yihadistas” en España.

Y otras, de carácter más individual, en un tercero:

. El “convencimiento” interior de la necesidad de defender “su Islam” ante la existencia de una “agresión permanente” al mismo por parte occidental y, por ende, española.
. La “incapacidad” para integrar “su Islam” en el mundo actual generando frustraciones que le llevan a la solución violenta abandonando cualquier intento de comprensión de lo occidental o de integración en su mundo, de forma que cualquier tensión intercultural aparecida en el país que les acoge, en este caso España, es tomada como ataque a la comunidad musulmana por el mero hecho de ser musulmanes.

Seguramente se ha de contar con más respuestas, aquellas que cada uno de los terroristas “yihadistas”, particularmente, se dan a si mismos atendiendo a sus experiencias y situaciones personales en relación con España.

Respuestas todas que, en su adición (en la que el orden o prioridad de los sumandos-planos o su número no altera aquí el resultado), “aseguran” la convicción personal de los “yihadistas” en la existencia de una situación de “guerra contra su Islam” en territorio español y, por tanto, la necesidad de una respuesta “armada” en tal territorio.

Situación de “guerra” que, exacerbando su agresividad, coloca pues a España y sus intereses en el punto de mira de los terroristas “yihadistas”, preferentemente para los cercanos por razones obvias: el GICM -Grupo Islámico Combatiente Marroquí- y el GSPC –Grupo Salafista para la Predicación y el Combate-, pero sin descartar la posibilidad de acción de otros más lejanos.
Una "yihad", un terrorismo "yihadista" que, con sus "razones" propias, no precisa pues de la impulsión de los terroristas autóctonos, cuyas motivaciones les son ajenas, para actuar en territorio español.

sábado, 27 de octubre de 2007

LAS "CAPELINHAS" DE SAN MARTÍN


LAS “CAPELINHAS” DE SAN MARTÍN

(“Sentimientos de Lisboa”. Artículo Diario de Burgos. Burgense)

Fernando Pinto Cebrián



El “paladeo” de los nuevos vinos, acompañado del deleite de las primeras castañas asadas, inicia, en estas alturas del otoño portugués, el ritual de todos los años: se abre el camino hacia la fecha de máxima exaltación de tales productos, el 11 de noviembre, día de “Sao Martinho” (San Martín, el franciscano francés que partió su capa entre los pobres acosados por el frío), día de las “capelinhas” (capillitas) en su honor.
Día en el que se sigue tradicionalmente el dicho o refrán portugués de “pelo Sao Martinho vai a adega e prova o vinho” (para San Martín ve a la bodega y prueba el vino).
Dejando a un lado la fiesta religiosa, bastante abandonada por cierto (el templo ha dejado paso a la bodega ya que algunas Hermandades del Santo se constituyeron con los mayores aficionados al “trasiego” del lugar), la manifestación popular, también evolucionada (antes se comía en la Capilla del Santo y luego se sermoneaba desde dentro de una cuba de vino), se ha convertido principalmente en una explosión de alegría profana, tal vez necesaria ante la cercana llegada del triste invierno.
Así, en Lisboa, ese día, en muchos de sus barrios, se organizan bailes, músicas y puestos donde el vino nuevo (“jeropiga” y “agua-pé”, preparado con el bagazo de la uva al que se le añade agua para conseguir un vino “fraco”-flojo-) y el viejo se pueden degustar abundantemente para ahogar penas y afinar gargantas. Fiestas donde las castañas asadas de acompañamiento, antes prácticamente único, son ahora una vianda más de las múltiples que allí se presentan para “petiscar” (picar), para “aconchegar” (llenar, trabar) el estómago.
Finalizada la celebración quedará sólo como “resto” festivo, recordatorio durante un tiempo (hasta casi la primavera), la agradable posibilidad de degustar las castañas asadas a la venta en gran número de característicos tenderetes o puestos, fáciles de descubrir en diversos puntos “estratégicos” de las calles lisboetas.
Puestos, hoy estáticos, que sustituyen a los tradicionales vendedores ambulantes de “castañas” de otros tiempos, encargados de abrir el apetito a los viandantes al grito de “quentes e boas” (calientes y buenas). Puestos fijos, soporte de un asador pequeño, básicamente constituido por una especie de palangana, no muy grande, que acoge el fuego, una rejilla encima en la que se colocan las castañas y una especie de embudo metálico, adaptado a lo anterior, sirviendo de horno y de chimenea.
“Resto” festivo, las castañas, que desaparecidas las “capelinhas” del Santo, frías en su abandono, quedan ahí para calentar la “capilla” propia de cada uno, aquella del estómago y nuestro cuerpo a falta de un pedazo de capa que recibir para cubrirnos del relente.

domingo, 21 de octubre de 2007

LA DOBLEZ DE LOS AGENTES DOBLES (DIMES Y DIRETES)


LA “DOBLEZ” DE LOS “AGENTES DOBLES” (“DIMES Y DIRETES”)


Fernando Pinto Cebrián



Recientemente la prensa ha recogido la noticia: el Servicio Secreto español ha “levantado” a un ex “agente doble”…

Noticia que, sin entrar en concreciones absurdas, nos permite efectuar los siguientes Dimes y Diretes desde un punto de vista analítico general para todos los casos de “doblez”.

Veamos los DIMES:
La Inteligencia, la que sea, al servicio de cualquier organismo del Estado, el que fuere, tiene éxitos y fracasos.
Frecuentemente, de los primeros, salvo por necesidad de realzar su prestigio, se habla poco, unos por secretos en su ejecución y resultado, otros por evitar dar pistas al “enemigo”.
De los segundos tampoco mucho. Los responsables, interesados, si pueden, los ocultan, pero si no es posible saltan rápidamente a los tabloides.
Ejemplos múltiples podemos encontrar en nuestra historia contemporánea, sólo hay que revisar, con la reserva debida en cuanto a contenidos, las hemerotecas o solicitar datos a “Internet”.
En todo caso, en este tema, hay que tener en cuenta que hay éxitos aparentes que luego resultan fracasos o, al revés, fracasos en principio que luego son un éxito.

Y ahora los DIRETES:
Uno de los casos particulares del binomio maniqueo “éxito-fracaso” bien conocido por todos, en la ficción a través de la literatura y el cine “de espías” y en la realidad a través de los m.c.s., es el caso de la “doblez” de los “agentes dobles”.
“Doblez”, que da carácter a tal tipo de “agentes” y que puede suponer un éxito o fracaso dependiendo del lado en que esté situado el manipulador del “doble” y el propio “doblado”. Así, aquel y éste podrán ser patriotas o traidores según desde donde se mire.
Veamos.
Si observamos la casuística general un “agente doble” puede serlo por variadas razones (algo que no explica la prensa):
. Profesionalidad: Cuando el que se dobla es un agente escogido por su Servicio a tal fin. Su misión: obtener información y/o intoxicar al servicio que lo “contrata-compra”. Tal agente puede ser profesional u oportunamente profesionalizado. Por su trabajo es considerado un patriota.
. Por “doblaje” de un agente ya “doblado” por el enemigo, dándole la vuelta a nuestro favor. Se le puede “perdonar” la traición y el resultado puede ser un éxito.
. Interés económico: cuando el agente o ex agente busca ser "doblado" interesadamente a cambio de dinero. Su "compra" le hace traidor.
. Ideología política, social, religiosa,…: Cuando el doblado cuenta con una ideología encontrada con la propia de su Gobierno y de su organización que le lleva a actuar en su contra convirtiéndose en traidor.
. Venganza contra su Servicio o algunos de sus miembros por frustración de su carrera u otro problema. Su odio le convierte en traidor.
. Chantaje efectuado por el Servicio que le “compra” aprovechando alguna de sus vulnerabilidades (descartando la económica ya citada) personales o familiares. Explotación de vulnerabilidades que le conducen a la traición.
Sólo en el primer caso y el segundo, si no se le descubre y se alcanzan los objetivos propuestos, se puede hablar de éxito, caso contrario será un fracaso.
Todos los demás son un auténtico fracaso y un gran fallo para la seguridad.
Fallo porque, en esos casos, superó la prevención y agredió al sistema, obligando a su reparación.
Y para tal comprensión hay que tener en cuenta que siempre que falla la seguridad hay que considerar que la misma no era tal, es decir, que no había suficiente seguridad, y que los responsables de la misma, ejecutivos y dirección, no controlaron adecuadamente el sistema (pero de ésto, lógicamente, tampoco hablará la prensa).

viernes, 5 de octubre de 2007

TAÑIDOS ESPAÑOLES (Y BURGALESES) EN BRASIL


TAÑIDOS ESPAÑOLES (Y BURGALESES) EN BRASIL

(Artículo Diario de Burgos. Burgense)

Fernando Pinto Cebrián


Día 12 de Octubre de 1977, fiesta de la Hispanidad en aquella altura.
En Brasilia fiesta de “Nossa Senhora Aparecida”, patrona de Brasilia.
Fiesta especial también para los españoles residentes en Brasil (unos 500.000 en aquella época) por la instalación en el “campanil” (campanario) de la catedral de Brasilia (proyecto del arquitecto Oscar Niemeyer) de cuatro campanas traídas, en 1973, desde España, en concreto de la fundición, ya desaparecida, de la Viuda de Perea en Miranda de Ebro.
Días antes, brasileños y españoles residentes (quienes las costearon, recibiendo también el apoyo del Gobierno español) pudieron contemplarlas cubiertas de flores a la espera de su consagración y colocación definitiva.
La llegada a ese momento no estuvo exenta de aventuras. Aquellas expuestas eran las segundas campanas enviadas desde España, las primeras se hundieron en el mar al naufragar el barco que las transportaba frente a las costas de Brasil (éstas fueron posteriormente recuperadas y luego repartidas por otras iglesias brasileñas).
“Sinos” (campanas) que, bautizadas con nombres significativos para la festividad española: la “Pinta” (de 1.300 kilos de peso), la “Niña” (de 1.000 kilos), la “Santa María” (de 3.300 kilos) y la “Pilarica” (de 740 kilos), mudarían a otros brasileños: respectivamente, “Santa Cruz”, “Santa María”, “Nossa Senhora Aparecida” y “Nossa Senhora do Pilar”.
Tras la bendición impartida por el Arzobispo de Brasilia y los acordes de los himnos nacionales de España y de Brasil, las campanas fueron izadas a cada uno de sus lugares respectivos: la primera en subir fue la “Pilarica” y, posteriormente, la “Pinta”, la “Niña” y la “Santa María” (el equilibrio del campanario en atención a los pesos de las campanas obligaron a tal orden).
Alrededor de unas 5.000 personas soportaron estoicamente la elevada temperatura del día, y entre ellos los españoles con alto “calor” emocional que luego sería recogido con cariño por la prensa brasileña.
Más fríamente, la placa situada en el pié del campanario recoge para la posteridad el recuerdo a la intervención española en el acontecimiento: “Inaugurado a 12 de Outubro de 1977, os sinos foram doados pelo Governo da Espanha e pelos españois residentes no Brasil. As solenidades foran presididas…”
De todas formas y al margen de lo escrito, son y serán siempre los sonidos, los tañidos de aquellas campanas, españolas y burgalesas por origen, apoyados por un sistema electrónico que intenta superar las dificultades que ofrece la falta de cúpula de los campanarios habituales, los que más recuerden a las generaciones presentes y posteriores de brasileños y españoles la entrañable amistad que une a sus pueblos.